Un mal control de la diabetes puede provocar ceguera brusca
La retinopatía diabética afecta a más de la mitad de los diabéticos
La diabetes es una enfermedad que requiere muchos cuidados, entre ellos también el oftalmólogo, puesto que un mal control de la enfermedad metabólica, que este domingo celebra su Día Mundial, puede ocasionar una pérdida brusca y total de la visión. Esto es debido a la retinopatía diabética (RD), principal complicación de la diabetes en la vista, afecta al 50% de los diabéticos de entre 40 y 59 años y al 70% de los mayores de 60, advierten oftalmólogos de IMO Grupo Miranza.
“Uno de los principales problemas con los que nos encontramos es que, en muchos casos, la RD, pese a estar en una fase muy avanzada, no avisa (no hay dolor, ni una afectación visual muy evidente) y el paciente puede perder toda la visión del ojo de golpe”, explica el doctor Carlos Mateo, cirujano con más de 35 años de experiencia en enfermedades de la retina de IMO Grupo Miranza.
El aspecto clave es que “la diabetes causa daños en los vasos sanguíneos de la retina y, sin el debido control por parte del especialista, avanza hasta su tipo más severo: la RD proliferativa”, prosigue el Dr. Mateo. Esta forma de retinopatía se caracteriza por el crecimiento anormal de vasos sanguíneos en la retina, pudiendo dar lugar a graves problemas de visión, como hemorragias en el interior del ojo (no son visibles externamente pero causan pérdida de visión, en muchos casos, severa) o un desprendimiento de retina.
Afortunadamente, “hoy en día, en países como el nuestro, los pacientes con diabetes suelen tener un buen control de la enfermedad. No obstante, todavía nos encontramos con algunos casos que desarrollan los tipos más graves de RD al no seguir las pautas de los especialistas en endocrinología”, puntualiza el oftalmólogo.
Abordaje temprano de la retinopatía diabética
Ante un paciente con RD, lo ideal, señala, es “no dejar que la enfermedad avance hasta su tipo proliferativo porque, en ese punto, ya es necesario operar, dado que el estado en el que llega a la clínica suele ser ya muy grave y es más complicado que recupere la visión total o
parcialmente. Por eso, siempre insistimos en la importancia de la prevención a través de revisiones y del control metabólico de la enfermedad”, explica Mateo.
Para los casos menos graves, existen otras técnicas menos invasivas, como las inyecciones de fármacos en el interior del ojo o el láser. No obstante, “cada caso debe ser valorado de forma personalizada, por un oftalmólogo experto en retina que pueda ofrecer una solución a medida, con el objetivo de ayudar al paciente a recuperar el máximo de visión y prevenir que las complicaciones visuales de la diabetes vuelvan a aparecer”, concluye.
Fuente: https://www.elperiodico.com/es/sanidad/20211111/mal-control-diabetes-provocar-ceguera-12838754